miércoles, 23 de marzo de 2016

Casa oculta por Juan José Paso al 5600


Algunas casas no tienen fachada. Se esconden detrás de una puerta flanqueada por dos pilares (eso es una fachada) y tal vez algunas rejas o pequeños tapiales. Y detrás está la casa.

Esta, cerca de la esquina de J. J. Paso y Ottone, es una de las más curiosas que pude ver en esta zona de Rosario. Es antigua, no hay duda; casi seguramente más antigua que el barrio en sí, que fue loteado hacia mitad del siglo XX.

Detrás de la masa de plantas que conforma la "fachada", se puede ver la casa, con la pintura bastante deteriorada por la intemperie, pero sobreviviendo bastante bien. De todas maneras, es difícil encontrarla entre las hojas; por eso me concentré en tomar esta referencia de la puerta, tan particular. Tiene un candado; en otros momentos creo que el mismo no estaba, por lo que calculo que fue cerrada hace no mucho. De todas maneras no recuerdo haber visto salir a nadie de allí en años.

Más adelante veré si puedo tomar otras fotos, pero esto es lo que tengo por ahora.

lunes, 14 de marzo de 2016

Detalle art deco en Juan José Paso casi Cabal

Ciertos lugares de la ciudad esconden mucha historia, aunque no aparezca. Algunos barrios fueron fundados cuando todavía existían ciertos estilos arquitectónicos ahora perdidos, o partes de los mismos tienen edificios aislados con estas características. Empalme Graneros es uno de esos lugares.

Por eso no es raro, si uno sabe mirar, encontrar ciertos detalles, principalmente art-decó, escondidos detrás de carteles o en terrazas descuidadas. El de hoy es uno de los pocos que he podido ver, y se conserva apenas: casi en la esquina con calle Cabal, bajo la puerta de un pasillo, junto a un negocio como otros, está esta moldura descuidada y algo dañada por una reparación o remodelación reciente.

No es el único, pero es uno de los pocos que se lucen a la luz del día. Y eso es algo. Lamentablemente, el descuido en el mantenimiento de los edificios, que muchas veces son alquilados por dueños que solo los ven como máquinas de hacer dinero no ayuda.

viernes, 11 de marzo de 2016

Puerta tapiada en San Lorenzo y Dorrego

Comentábamos en entradas pasadas lo triste que me resultan las casas tapiadas, tanto por la desprolijidad con lo que se hacen estos trabajos, como por la pérdida de puertas, ventanas y otras partes para el paisaje urbano.

El otro día vi un caso muy sorprendente en una zona poco acostumbrada a este tipo de cosas: San Lorenzo y Dorrego, justo en la esquina de la antigua Jefatura de Policía, hoy parte del Museo Provincial de Ciencias Naturales.

En esta foto podemos ver la esquina, algo deformada por la perspectiva de GSV. Digo que es algo raro ver esto por esa zona porque, lamentablemente, lo normal es que directamente demuelan el edificio. Acá pasó otra cosa.

El colectivo pasa rápido por esa zona pero por suerte hay parada, por lo que la sorpresa casi me gana, pero puede tomar una foto rápidamente con el celular. En ese día me quedó la idea de que esto anticipaba demolición; solamente faltaban las vallas. No tengo idea de donde habrá ido a parar la puerta, lo cual, como digo, es una pena porque era hermosa, como muchas cosas que se hacían en esas épocas, pensando más en lo artístico que en lo económico.

Lamentablemente no pude pasar por varios días para atestiguar cómo seguía la cosa. Como puede verse, el trabajo era bastante prolijo, y me llamó la atención que los ladrillos estaban muy bien alineados y se había cuidado la fachada.

Lo raro es que, como puede verse en la foto de GSM, el edificio era comercial, con lo cual al taparse su única entrada, supongo que había sido unificado con otra parte del mismo; no entiendo por qué cerrarían una puerta solamente. A la vuelta, por Dorrego, hay una puerta amplia, casi parece una cochera pequeña, pero pareciera que la forma de acceder al edificios queda muy golpeada; en resumen, no me cierra, y parece un capricho. Por eso, más que nada, lo pongo como fallo.

Sobre estas elucubraciones, al final cuando logro pasar de nuevo por la zona, en colectivo, estoy con el celular preparado, en mano. Y saco esto que viene a continuación:




Así que ahí quedó todo. Zas y ya no hay más puerta. Como dije antes, aprecio la prolijidad del asunto, pero lo pongo como fallo porque no entiendo la causa: por qué la ciudad pierde una hermosa puerta. Esperemos que no toquen más este edificio tan hermoso.

miércoles, 2 de marzo de 2016

Algo mejor en Laprida al 1100

A veces uno descubre que tiene que rectificar: ese edificio no se demolió, ese quedó mejor de lo que parecía... Y en este caso, ese edificio no quedó tan mal al terminarse la remodelación y ver el objetivo de la misma.

Tiempo atrás, comentaba en otra entrada cómo un edificio muy lindo parecía estar siendo destripado por fuera, sin ver el motivo aparente. Afortunadamente paso seguido por la zona y el otro día pude ver que no todo estaba perdido. Con algo de cariño y tiempo se arreglaron los detalles y ahora todo quedó mejor.

En estas dos fotos que muestro se pueden ver los resultados (los invito a ver la entrada anterior para ver cómo estaba antes). Al final resultó que la viga que tapaba la puerta, por la que se tuvo que sacrificar una moldura, era la parte superior de una cochera pequeña.

Los encargados de la remodelación tuvieron incluso el detalle de dejar un bajorelieve geométrico en su lugar, para tapar el hueco, en lugar de una pared lisa. Las molduras restantes fueron pintadas encima con el mismo color de la fachada, algo que le resta mucho, creo yo, pero no se puede pedir todo.

Mirando mejor la fachada, pude notar ahora la firma (es de un arquitecto que conozco de nombre, pero que ahora justo no recuerdo), y también los detalles de la baranda sobre la terraza, que no parece moderna sino que debe ser de la época de la casa. Aunque todo indica que se perdió mucho de su fachada original (porque hay elementos que no coinciden, y no hay simetría), por lo menos lo principal pareciera sobrevivir.

Con tiempo, espero pasar por la zona y agregar fotos de los detalles ya mencionados. Y, además, hacerle justicia a los otros edificios de esa cuadra, que son casi todos antiguos. Por suerte esta región del centro, si bien está descuidada, tiene muchas cosas bonitas para ver. No por nada me gustaría mudarme por ahí.